Hola gentecilla que se pasa por este blog.
Gracias a todos los que se han preocupado por mi estado de salud durante esta semana que he pasado ingresado en el hospital.
A lo largo de esta semana si tengo tiempo y ganas iré actualizando un poco, y que el pobre de Pocholokin estará hasta los huevos de actualizar.
No se que contar, supongo que muchos de vosotros ya sabéis cono va esto de los hospitales. Sabes cuando entras pero no cuando sales, la primera noche la pase en urgencias, el peor sitio donde te pueden meter, ya que cada dos por tres siempre ves médicos corriendo de arriba para abajo. Me acuerdo que la primera noche los médicos tuvieron que atender dos infartos de corazón donde estábamos. Pero bueno eso solo fue una noche y con el dolor y los goteros me metí en mi mundo interior y pasaba de lo que sucedía a mi alrededor.
El trato de los médicos deja mucho que desear, puesto que todos iban a su bola, pero supongo que es por que ellos llevan ya mucho tiempo y lo que a ti te puede impresionar o asustar ellos lo tienen como algo cotidiano.
Luego ya me metieron a observación, que es una sala súper grande llena de camas separadas por cortinas de tela. Esa noche no dormí, tenia un hombre al lado que se tiro toda la noche gritando. Le decía a su mujer “nena, como en 20 minutos no venga el médico, yo me quito esto y me voy”.
Y enfrente tenia a una mujer mayor que ya la pobre “chocheaba” un poco y que me decía “Carlos cariño ven y desátame que las locas estas me quieren poner morfina para robarme el anillo”.
Y ya por fin me llevaron a planta, cosa que agradecí mucho, por que estaba solo en la habitación.
Yo no se quien prepara la comida en los hospitales que sabe y huele toda igual.
Los primeros días no me daban de comer nada, pero luego ya siempre llegaba una enfermera súper maja y me daba una bandeja.
Y bueno eso es todo ^^.
Si eso otro día os cuento algo mas.
Ahí estan las fuerzas del orden de Beniel velando por nuestra seguridad. Eso es inspirar confianza, jajaja.
